14.1.05

Usted y El Gojonzon

Por: Leigh Kennicott, corresponsal en Los Angeles.
Cómo tener una práctica para romper barreras
Traducido por SC Feb. 1997

Nuestra práctica del Budismo de Nichiren Daishonin significa romper barreras continuamente. Se podría decir que la Revolución Humana, en realidad, es romper barrera tras barrera. Hay muchos aspectos involucrados en esta lucha. En esta serie expondremos siete. Cuando entonamos Daimoku, La Ley Mística se manifiesta en nuestro medio ambiente como resultado de hacer surgir esta condición de vida.


Desde el momento que lo encontramos, cada uno de nosotros se forja una relación única con el Gojonzon. Así también, en los comienzos de nuestra practica, la mayoría de nosotros sabe de qué se habla cuando se describe al Gojonzon como “una joya que concede los deseos” y como “un enjambre de beneficios.” A medida que continuamos la práctica, aprendemos que no debemos buscar el Gojonzon fuera de nosotros mismos, que el Gojonzon es la manifestación de Nam Miojo Rengue Kio desde lo profundo de nuestras vidas.

Cuando entonamos Daimoku, La Ley Mística se manifiesta en nuestro medio ambiente como resultado de hacer surgir esta condición de vida. Esto, a la vez, nos puede servir como una referencia reconfortante. En el Gosho titulado “Sobre Alcanzar la Budeidad”, Nichiren Daishonin afirma: “Si piensas que la ley esta fuera de ti, no estás abrazando la Ley Mística sino alguna otra enseñanza inferior.” (escritos principales de Nichiren Daishonin, vol.1,pag.3). Sin embargo, es facil comportarse como si la Ley estuviera fuera de nosotros y, debido a que nos sentimos inferiores, caemos en una actitud de súplica frente al Gojonzon.

La mayoría de los que venimos de un trasfondo judeo-cristiano tendemos a conferir al Gojonzon los aspectos del que todo lo ve y todo lo sabe que antes le adjudicábamos a deidades externas. Aunque se nos enseña que
el Gojonzon y nosotros somos uno, es fácil ver al Gojonzon como la corporificación de una condición que aún no hemos alcanzado, por lo que nos encontramos diciendo: “por favor, permíteme”, “por favor, muéstrame”,
“por favor, ayúdame.”

La Sra. Yumiko Hachiya, Asesora de la División de Damas de la SGI-USA nos ha expresado: “Cuando comprendes profundamente este punto específico, que la maravillosa naturaleza de Buda existe en tu vida, podrás conectarte a una tremenda fuerza interior, elevar tu condición de vida, cambiar tu medio ambiente y producir grandes beneficios” (Seikyo Times, Sep. 1992, pag. 38). Por lo tanto, el tratar de romper una barrera en tu vida, puede ayudarte a ver el Gojonzon desde un nuevo ángulo. Una manera de hacerlo es ponderar en cuanto a su evolución y significado. Nichiren Daishonin escribió: “Yo, Nichiren, he inscrito mi vida en sumi así que crea en el Gojonzon con todo su corazón. La voluntan del Buda es el Sutra del Loto pero el alma de Nichiren no es otra que Nam Miojo Rengue Kyo” (MW-1,120).

Al manifestar su vida como el Gojonzon, Nichiren Daishonin sondeó en las profundidades del Sutra del Loto de Sakiamuni y encontró su esencia en un evento llamado la “Ceremonia del Aire”, donde innumerables seres se entregaron para escuchar a Sakiamuni predicar la Ley desde la Torre del Tesoro.

El Sutra del Loto describe la Torre del Tesoro con suntuosos detalles: “En esta época, ante la presencia del Buda, había una torre adornada con siete tesoros, tenía 500 yoyanas de alto y doscientos cincuenta yoyanas de ancho profundidad, y se elevaba de la tierra y permanecía suspendida en el aire. Le adornaban varios tipos de objetos preciosos. Contaba con cinco mil barandas, diez mil habitaciones y estaba decorada con innumerables gallardetes y banderas, guirnaldas de joyas. Los cuatro costados emitían una fragancia de tamalapatra y sándalo que permeaba el mundo entero. Sus banderas y sus doseles estaban hechos de los siete tesoros...y era tan alta que llegaba hasta los palacios celestiales de los Cuatro Reyes Celestiales.” (El Sutra del Loto,pp.170-171.). Esta torre es tan magnífica que innumerables seres se reúnen para hacer ofrendas. Entonces, una voz emana de la torre, es el mítico Buda Tajo que aparece para verificar que las enseñanzas de Sakyamuni son verdaderas, y dice: “Excelente!, excelente!, Sakyamuni, el honrado por el mundo que pueda tener la gran misericordia de la igualdad, una ley para instruir a los Bodisatvasa, resguardada y mantenida en mente por los budas, el Sutra del Loto de la Ley maravillosa y predicarla por el bien de la gran asamblea!. Es como usted dice, como usted dice. (El Sutra del Loto,p.71).”

Nichiren Daishonin utilizó esta conmovedora alegoría para describir su propia vida, después escribió: “En el Día Posterior a la Ley, no hay otra Torre del Tesoro que los cuerpos de los hombres y mujeres que abrazan el Sutra del Loto. Por tanto, lo que sigue es que aquellos que entonen Nam Miojo Rengue Kio, sin importar la posisción social, son en si la Torre del Tesoro e igualmente, ellos mismos son el Buda Tajo.”(MW-1,30).

Tanto la Torre del Tesoro como nuestros propios cuerpos son la Ley Mística de Nam Miojo Rengue Kio, y la Ceremonia del Aire es el evento sin tiempo en el cual respetamos, honramos y alabamos esta Ley que lo permea todo. En su libro sobre el Budismo de Nichiren Daishonin, el fallecido director general de la dirección general del Reino Unido, Richard Causton, escribió: “Al basar el Gojonzon tan estrechamente en la ‘Ceremonia del Aire’, Nichiren Daishonin no sólo estaba estableciendo una línea directa entre el Budismo de Sakyamuni y el de él, sino que estaba clarificando el objeto de veneración y la Ley que Sakyamuni indirectamente insinuó durante esa ceremonia eterna y universal”, (El Budismo de la Nichiren Shoshu,
pág.238).

En realidad, participamos en la ceremonia del aire cada vez que entonamos y recitamos el Sutra del Loto al Gojonzon. Respetamos, alabamos y honramos la magnífica Torre del Tesoro que es Nam Miojo Rengue Kio, la vida de Nichiren y nuestra propia vida. Los estudiosos budistas especulan que Nichiren Daishonin inscribió el gojonzon como una experiencia tridimensional. Igual que en muchas culturas, en Japón la posición de honor se coloca a la derecha. Sin embargo, en el Gojonzon, Sakiamuni está representado a la izquierda. Por tanto,
se infiere que tanto él como el Buda Tajo, así como Nam Miojo Rengue Kio, están mirando hacia afuera, mientras que el resto de los dioses, demonios y bodisatvas que representan la teoría de Ichinen Sanzen miran hacia la misma dirección que una persona frente al Gojonzon.

Hasta ahora hemos verificado la idea de que el Gojonzon no existe fuera de nuestras propias vidas, de que el
Gojonzon y nosotros somos uno y lo mismo y de que cuando entonamos daimoku, entramos en una ceremonia eterna de reverencia y alabanza. Este es el acto que puede sacarnos de nuestra posición habitual de súplica. Como explica el presidente Ikeda: “Cuando nos sentamos erguidos frente al Gojonzon, un mortal común desde el tiempo sin comienzo y el Buda desde el tiempo sin comienzo se sientan uno frente al otro. Ese
momento de relación provee un asiento sublime donde usted une sus palmas para convertirse en uno con la
verdadera entidad de todos los fenómenos. Contiene el desbordante poder de abrazar, integrar y motivar
todas las existencias. Esto es lo que significa ‘todas las causas y efectos entre las existencias desaparecen, y
emerge un mortal común desde el tiempo sin comienzo.’ (El Budismo de la Nichiren Shoshu, pag.237).

Con esto en mente, cuando estamos haciendo Gonguio, es como si estuviéramos frente al Gojonzon diciendo con el Buda Tajo: “¡Excelente!, ¡Excelente!”. (Continuará)


Darse cuenta de la resistencia para romper barreras

Tomado del World Tribune del 10 de Marzo de 1995 - (primero de una serie de siete).
Traducido para Seikyo Criollo SGIV. Feb. 1997

¿Te sientes como si estuvieras confrontando el mismo obstáculo una y otra vez? ¿Como si nada estuviera cambiando? Te preguntas, "¿Donde estan mis beneficios?" ¿Te sienntes abrumado por tu medio ambiente? Necesitas romper barreras.

Esta bien, todos necesitamos romper barreras. Nuestro quehacer en la práctica de Nichiren Daishonin significa romper una barrera tras otra. Nunca termina, porque el proceso de Revolución Humana es infinito.
El romper barreras comienza con nuestra determinación, algo tan sencillo como fijar una meta. Entonces,
tal y como nos lo recuerda constantemente Nichiren Daishonin, surgirán de forma natural los obstáculos o la resistencia.


El diccionario inglés Webster define la palabra obstáculo como: “La acción, el resultado de atravesar una
resistencia”, y 2 “Un avance o descubrimiento impresionantemente importante”. Según la primera definición, no es un obstáculo a menos que confrontemos una resistensia. Sin embargo, a veces la resistencia es dificil de conocer. Es la tendencia humana de resistencia al cambio, a las cosas nuevas. Como dice el refrán: “Si no está dañado, no lo arregles”. Sin embargo, Nichiren Daishonin habló a quienes escogieron el arduo sendero de la Revolución Humana.

En el Gosho “Sobre las profecías del Buda” él escribió: “Para descartar lo superficial y buscar lo profundo se necesita valentía" (Escritos Principales de Nichiren Daishonin, vol. 1, p. 117). La resistencia podría venir de nuetro medio ambiente (por ejemplo, cuando otros nos dicen que no podemos alcanzar nuestras metas) o podría venir desde dentro de nuestras vidas. Con frecuencia reconocemos la resistencia por las excusas que nos damos. ¿Te suenan familiares algunas de estas?: “No me lo merezco,” “No vale la pena”, “No debería entonar Daimoku para eso, “No debería ser tan codicioso.”

Pero tan pronto reconocemos la resistencia podemos detenerla. Ese es el proximo paso para romper barreras. Detener la resistencia quiere decir confrontar miedos, salir de la depresión, aclarar las confusiones. ¿A qué es a lo que nos resistimos? Ahí es donde podemos encontrar otra oportunidad para romper barreras.

Durante un taller reciente de la SGIUSA del sur de California, se presentaron siete tópicos que proveeen una lista, un punto de partida para atravesar lo que se está interponiendo entre tus sueños y tu:

• Nuestra relación con el Gojonzon.
• Nuestra actitud y cómo afecta el ambiente.
• Aceptar responsabilidad por nuestro Karma.
• El valor del ichinen y de la perseverancia.
• Nuestro espíritu buscador.
• Nuestra reacción ante los obstáculos.
• Nuestro compromiso con el Kosen Rufu ( en otras palabras, con la felicidad de los demás).

Hay un denominador común que hilvana estos tópicos: son áreas de nuestras vidas sobre las cuales nosotros, y solamente nosotros, tenemos el control. En otras palabras, el que logremos nuestra meta o no, depende de nosotros mismos.